Siguen batiéndose records de compra de aluminio reciclado

La compra de aluminio que proviene de la gestión de residuos cada vez es más voluminosa en Europa. Se trata de un metal que, tras usarse una y otra vez, no plantea ningún tipo de deterioro y además es una de las piedras angulares de la economía circular. Solamente en latas de bebidas y conservas se reciclan más de 400.000 toneladas de esta materia prima. Se trata de datos que no paran de aumentar durante los últimos años.

Los datos dejan a las claras que la compra de aluminio procedente de la reutilización supone un beneficio en todas direcciones. A nivel energético, el consumo que se realiza adquiriendo este metal desde el reciclaje es menor. Concretamente un 95% menos. Un apabullante dato que refleja el bien que las sociedades pueden hacer hacia el planeta fomentando este tipo de actividades. A nivel económico, la compra de aluminio reutilizado también resulta provechoso tanto para empresas como particulares.

Un sector en sí mismo

La rentabilidad es tal que numerosos inversores han decidido fijar sus miradas en actividades relacionadas. Las empresas de packaging cada vez proliferan más y, además, consiguen efectuar colaboraciones muy interesantes tanto con el tejido empresarial de gestión de residuos como con las administraciones públicas. En este contexto pueden encontrarse también las empresas de clasificación de residuos. Sin duda, toda una esfera multidimensional de compañías cuyo compromiso con el medio ambiente está premiado con una eficiencia y rentabilidad únicas.

Por este motivo, la compra de aluminio reciclado así como todos los procesos que intervienen en la actividad de gestionarlo, está dinamizando multitud de inversiones. Al mismo tiempo, conviene recalcar que el beneficio para el planeta es enorme. Cada año, los países europeos van subiendo los ratios de reutilización de los envases de aluminio. El objetivo de cara a esta década es alcanzar el 100% de ese ratio en nuestro país.