El acero es un metal que no pierde sus cualidades al reciclarse, como la resistencia, la maleabilidad o la dureza. Se puede reciclar tantas veces como se desee. La Unión de Empresas Siderúrgicas estima que desde 1900 se han reciclado 22.000 millones de toneladas de acero. En el mundo, indicar que el acero reciclado es un material muy importante.
En la fabricación de acero reciclado casi no se desperdicia material. Es el material más fácil y barato de recolectar de todos los que se producen. Y es el más reciclado del mundo, tanto en calidad como en cantidad.
El acero es muy útil para muchos productos, con el acero reciclable se puede fabricar cualquier cosa adecuándolo a la composición exacta de cada calidad requerida.
La tasa de reciclado de envases de acero en España se ha duplicado en la última década, en Europa se recicla el 70% de los envases de acero. Todavía se puede mejorar y para ello se necesita de los consumidores y ciudadanos. El 17,5% proviene de empresas de reciclaje de chatarra como Recemsa.
Otra razón que explica el éxito del reciclaje de acero es su integración en el proceso de producción del acero nuevo. La siderúrgica española afirma que por cada tonelada de acero reciclada ahorra alrededor de una tonelada y media de mineral de hierro, un 85% de agua, un 80% de energía y un 95% de carbón.
El aumento y la mejora del reciclaje de acero reduce así el impacto ambiental. La responsabilidad ambiental de la industria es cada vez mayor. El 100% del acero español se produce bajo sistemas de gestión ambiental certificados (ISO 14001 y70 EMAS), sin olvidar la inversión en I+D
España es uno de los grandes productores mundiales de acero: el tercero de la UE y el decimoquinto mundial (datos del 2010). Las empresas de este sector facturan 14.000 millones de euros y dan trabajo a 60.000 personas (directo e inducido) y 20.000 más vinculadas a la recogida de chatarra (como Recemsa).
Nos enfrentamos a un desafío y es que el elevado ritmo de producción de países emergentes, en especial China, podría hacer escasear la chatarra. Es muy importante la labor de los gestores de chatarra en la correcta clasificación y separación de la chatarra para que no este mezclada con metales cobre o el estaño.
La UNE 36199:2013 es la norma española sobre tipologías de chatarra de acero. La norma adapta las tipologías de chatarra del mercado español a la realidad del país y unifica, en lo posible, un gran número de calidades referidas internacionalmente. La norma surgió de la colaboración de todos los agentes involucrados en la cadena de calor del reciclado de acero. Que participaron activamente en su actualización. Varias fuentes representantes de la generación de chatarra, de su recolección y su adecuación y finalmente el sector siderúrgico encargado de refundir la chatarra y convertirla en nuevos productos de acero están haciendo posible el cambio.
El acero es el material que mejor se recicla, y por ello es el gran referente del reciclaje; un material reciclable con rendimientos de reciclaje prácticamente del 100%. Es posible gracias a la concienciación de todos los operadores de la cadena del acero reciclable.
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