EL PROBLEMA DEL COBRE

EL PROBLEMA DEL COBRE

Compartimos una noticia publicada en el periódico El Mundo  el pasado mes de enero de 2012, tal y como indican habría que remontarse al año 2005 cuando incurrió China en el mercado internacional marcando el punto de partida del auge del cobre hoy indispensable en la vida actual.

El cobre es un metal de transición de color rojizo y brillo metálico que, junto con la plata y el oro son los mejores conductores de electricidad. Gracias a su alta conductividad eléctrica, ductilidad y maleabilidad, es el material más utilizado para fabricar cables eléctricos y otros componentes eléctricos y electrónicos.

Forma aleaciones para mejorar las prestaciones mecánicas y es resistente a la corrosión y oxidación.

Con el cobre se pueden realizar una cantidad elevada de aleaciones que generalmente presentan mejores propiedades mecánicas, aunque tienen una conductividad eléctrica menor. Las más importantes son conocidas con el nombre de bronces y latones.

La gran demanda del mercado asiático de cobre ha supuesto que haya triplicado su precio en los últimos años.

El precio y la frágil protección tanto a nivel físico como legislativo de este material ha provocado que muchas mafias el contrabando y la prostitución se han desplazado al robo de cobre según denuncia nuestra federación.

Aunque a menudo vemos en los periódicos y medios de comunicación noticias sobre robos de 100 kilos de hilo de cobre de las vías de tren, o de la red eléctrica, son anécdotas frente a los robos del crimen organizado. El verdadero problema es el robo en plantas de reciclaje y el de los camiones que, en menos de 24 horas, ya están cargados en un barco de un puerto del norte de Europa con destino a China. En el año 2011 se robaron 1600 toneladas de cobre de las que solo 625 fueron recuperadas.

Nuestra federación está conforme con el trabajo policial, hubo más de 4.000 detenciones el año pasado relacionadas con el robo de cobre, el problema es que probablemente la mayoría de estos detenidos ya estén libres. Las condenas penales que se les aplican son acordes al precio del material sustraído pero muchas veces se causan graves daños que multiplican el valor del material. La federación reclaman para España una solución como al de EEUU, una fiscalía específica para estos delitos y conseguir se incluyan los daños en la tipificación penal de delito y no en la cuantía civil.

El destino de estos robos no siempre va directamente al mercado internacional. Muchas veces “un tío se monta una supuesta chatarrería con cuatro palos y unas vallas”. Los gestores autorizados como Recemsa compran material cuya trazabilidad está debidamente documentada. Más del 50% de la producción de cobre español es reciclado lo que supone unas 250.000 toneladas.

La crisis económica es un doble enemigo para las empresas del reciclaje férrico español respecto al cobre. Además de la coyuntura económica tienen que hacer frente a un aumento de la delincuencia en el sector. Por un lado para proteger el material en sus propios almacenes, y por otro teniendo que extremar las precauciones a la hora de realizar cualquier tipo de transacción pues le implica multiplicar la vigilancia y revisión de sus proveedores para intentar saber con qué persona física o jurídica está trabajando y el origen licito del material.

En Recemsa sólo se compra o vende material con todos los permisos comforme a la legalidad vigente.

Fuente: elmundo.es